"Ekuquimera nace de un sueño. Hace mucho tiempo alguien me dijo que lo que yo buscaba con los caballos era algo imposible, que era una quimera. Siempre he sido idealista de corazón y siempre he creído en mi sueño. Por una convivencia y una relación ética y respetuosa con los caballos en la que podamos seguir aprendiendo y disfrutando"